Viento que te llena los pulmones a más no poder nos espero en Balmaceda, rápidamente nos dirigimos a Coyhaique y desde ahí a nuestra base… Mañihuales, donde Pato Pescador artista tallador de especies de agua dulce y salada, nos recibió en su hogar sin importar quienes fuéramos de donde veníamos ni menos lo que somos… Así comenzó nuestra gran e inolvidable “anécdota” de la pesca en la hermosa patagonia chilena.
Nuestro primer día de pesca a eso de las 7 y algo de la tarde, nos dirigimos casi al patio de la casa a pescar el río Ñirehuao, donde Mario, Fernando, Raúl y yo nos vimos recompensados con varias capturas cada uno, sinceramente no lo esperaba…
Al día siguiente nos dirigimos a pescar el río Mañihuales, tras pasar por un campo de larga vegetación y contemplar una laguna en frente de nosotros, seguimos nuestro camino a la pesca, aquel día solo a algunos les fue no tan bien…
Les seguiría contando las aventuras vividas pero fueron 15 días donde compartimos en ríos como El Turbio, Victoria, Picaflor, Cobarde, Picacho, Ñirehuao, Mañihuales, Emperador Guillermo, Río Norte y el tan conocido Lago Norte, Quizás se me pasó alguno por ahí.
Aprovecho de dar gracias a Patricio por abrirnos las puertas de su hogar con solo un interés de por medio, querer fomentar el turismo y de que nosotros incentivemos a más gente a conocer lo lindo de nuestro país y no perderlo. Muchas gracias también a Raúl Ramírez (Radul) por la buena onda y los datos, a Fernando (Trucha77), Mario (Centurión), Andrés, Raúl, Joaquín, Felipe, Profe, Chaitenino y su corderito patagónico acompañado de sus tan buenas historias, y obviamente a Benicio que nos llevo para todos lados, y les aseguro que pasamos por caminos que nadie más ha pasado jajajajaa… Muchas Gracias a todos. Aquí algunas imágenes, hay otras pero las espero en los comentarios de aquellos compañeros de pesca…







